El arzobispo emérito de Corrientes afirmó que no hay que vivir "atemorizados", ni tampoco "disimular o negar la gravedad de la situación en la que se encuentra el mundo".
El arzobispo emérito de Corrientes consideró que "momentos como los actuales, requieren protagonistas dispuestos al reconocimiento de la verdad, cuando aparece".
"Nuestra esperanza alimentada en esta Navidad por el nacimiento de Jesús nos compromete a trabajar activamente en ser constructores de una sociedad mejor", sostuvo el obispo de Posadas.
"La lógica del poder en el Evangelio está basada en la humildad y en la gratuidad, es la lógica de Jesús, es una lógica de fraternidad", aseguró el obispo de San Isidro.