Tras adherirse al Acuerdo de París en 2022, el Estado de la Ciudad del Vaticano está llevando a cabo un plan de acción para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero.
El vehículo, donado con motivo del Jubileo de 2025, es único, ecológico y adaptado específicamente a las necesidades del pontífice.
Es uno de los primeros Estados del mundo en perseguir proyectos de sostenibilidad en ese sentido, buscando soluciones innovadoras que ayuden a cambiar el modo del cuidado de la Casa Común.