VIVA JESÚS EUCARISTÍA.
VIVA JESUS MUERTO Y RESUCITADO.
VIVA JESÚS EUCARISTIA, ALIMENTO DE LOS MISIONEROS DEL REINO.
Queridos hermanos: celebramos con profunda alegría esta Fiesta del Corpus Christi, el Misterio Jesús presente en la Eucaristía, de su Cuerpo y Sangre:
La Palabra de Dios que hemos escuchado ilumina esta celebración y también nuestra vida cotidiana.
Dios ha sellado una Alianza con su Pueblo en el Antiguo Testamento. Se ha mostrado grande y misericordioso, liberándolos de la esclavitud de Egipto, ofreciendo en sacrificio el cordero pascual.
Ya en el Sinaí, el pueblo dijo a Moisés: "estamos decididos a poner en práctica todas las palabras que ha dicho el Señor" (Ex.24, 3).
Ellos ofrecieron sacrificios de comunión y lo expresaron con esta firme decisión de obediencia a la voluntad de Dios, sellando la Alianza con la sangre de terneros, rociada sobre el Pueblo y derramada en el altar.
Esta Alianza, nos decía la segunda lectura de la Carta a los Hebreos, es sólo un anticipo e imagen de la Nueva y Definitiva Alianza que Dios hace con la humanidad por la obediencia de su Hijo en la Cruz, derramando su sangre para nuestra redención y hacernos herederos de la vida eterna.
Es Jesús mismo, en la Última Cena, quien toma el pan y el vino y dice a sus discípulos "Tomen, esto es mi Cuerpo... Esta es mi sangre, la sangre de la Alianza que se derrama por muchos..."(Mc.14,22ss)
Dios hace Alianza con nosotros, nos ama, se hace cercano a todos, nos perdona, nos dignifica y nos lo demuestra en su Hijo Jesucristo que comparte nuestra humanidad y él mismo se parte, se reparte, se entrega para ofrecerse en Comunión, porque Él quiere estar dentro nuestro para prolongar su amor a través nuestro. Siendo Él mismo "Alimento para los Misioneros del Reino"
Como discípulos misioneros el Evangelio de hoy nos ofrece algunas enseñanzas:
Los discípulos preguntan a Jesús: ¿dónde quieres que te preparemos la Comida Pascual?
Hoy también nosotros debemos animarnos a decirle a Jesús: ¿dónde quieres que preparemos tu encuentro con los demás? ¿dónde quieres hacerte presente? ¿dónde quieres expresar tu amor hasta derramar tu sangre? ¿dónde quieres hacerte presente, entrar en comunión? ¿Dónde quieres que llevemos la alegría de tu amor en la Misión?
Y Jesús responde:
Estando todo dispuesto, ya en la mesa, Jesús se ofrece, se entrega, "Tomen, esto es mi Cuerpo... esta es mi Sangre..."
Mientras tanto vamos caminando juntos, como Iglesia sinodal, cercanos a todos, escuchando sus inquietudes y necesidades, alimentándonos con:
Para llevar a todos el pan de la Caridad, el Servicio y la Misión.
Vamos a caminar juntos al finalizar la Misa de hoy y Jesús camina con nosotros. Vamos a llevar a Jesucristo Eucaristía por las calles de la Plaza Independencia, testigo de muchas alegrías y sufrimientos de los tucumanos, para que él toque cada una de esas realidades y las transforme en Redención.
Vamos a caminar juntos, como Iglesia sinodal, reconociendo nuestra común dignidad bautismal, creciendo cada día en corresponsabilidad, desde la diversidad de carismas, servicios y vocaciones, como Misioneros del Reino de Dios.
María camina con nosotros. María, Madre de Jesús y madre nuestra. Es la mujer Eucarística, que nos enseña con su propia vida a recibir a Jesucristo, a encarnarlo en nuestro corazón y entregarlo a los demás en servicio y caridad. ¡Madre de la Merced, camina con nosotros para que seamos misioneros del Reino! Amen.
Mons. Carlos Alberto Sánchez, arzobispo de Tucumán