Mons. Ojea: 'El poder es el servicio, y eso tiene que ver con el amor'

  • 20 de octubre, 2024
  • Roma (Italia) (AICA)
El obispo de San Isidro envió su reflexión semanal desde Roma, e invitó a pedirle al Señor que "nos enseñe a tocar la realidad, a sumergirnos como en el Bautismo, y no a elevarnos".

El obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, envió su reflexión desde Roma, donde participa de la Asamblea Sinodal, y señaló que, en el texto del Evangelio de este domingo, "Jesús va camino a Jerusalén, y tres veces les ha dicho a sus amigos, a los apóstoles, que va a morir y que va a ser entregado".

"Sin embargo, ellos parecen estar en otro camino; no van con el camino y con la lógica de Jesús, sino que van con otra; en el fondo, es como usarlo a Jesús para trepar; es usarlo a Jesús, funcionalizando la relación con Él para tener un cargo", indicó. 

"'Queremos estar uno a tu derecha y otro a tu izquierda en el Reino': están fuera del camino de Jesús y, por otra parte, los otros que se enojan también están fuera del camino, porque por algo se enojan. Se enojan porque también ellos querían un lugar", agregó.

El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) afirmó que "ellos siguen esa lógica de elevarse para tener gloria: hay que elevarse, hay que estar por encima de; y, para Jesús, la gloria y el poder es el servicio, y eso tiene que ver directamente con el amor". 

"Ellos tienen que elevarse y ascender; Jesús les propone un camino de descenso, un camino de abajamiento", planteó, y diferenció: "Ellos quieren estar por arriba, el Señor quiere sumergirse en la realidad, como cuando uno se sumerge en el Bautismo, ese Bautismo del que habla Jesús en el Evangelio de este domingo".

"Con una gran paciencia, les va diciendo a los apóstoles que pretenden esos puestos: 'No saben lo que piden'. Es como para decirles: 'Están en otro camino'", graficó.

Monseñor Ojea invitó a pedirle al Señor que "nos enseñe a tocar la realidad, a sumergirnos como en el Bautismo, y no a elevarnos".

"Si queremos elevarnos a estar en otro registro y nuestras relaciones van a ser funcionalizadas, vamos a pensar en hablar con uno, hablar con otro; en tener vínculos que nos hagan ubicar de alguna manera en la sociedad, usándolos, como en el caso de los apóstoles. En cambio, si nos sumergimos libremente en la realidad, vamos a poder entrar en ese amor, que es servicio, y tocar las llagas vivas de Jesús, que es donde está la verdadera realidad", concluyó.+