Mons. Croxatto: 'Esperar y actuar con la Creación'
- 4 de septiembre, 2024
- Neuquén (AICA)
El obispo de Neuquén recuerda que la intención de este mes del Papa es "Por el clamor de la tierra", y cita párrafos de su mensaje para que, llevándolos a la oración, ayuden en el seguimiento de Jesús
El obispo de Neuquén, monseñor Fernando Croxatto, recordó que septiembre se inicia con una Jornada Mundial de Oración por el cuidado de la Creación, y señaló que la intención del Papa Francisco para este mes es "Por el clamor de la tierra".
El prelado señaló que, en su mensaje para este año, el pontífice propone "esperar y actuar con la Creación", y consideró importante "por tantas cosas que vamos viviendo", compartir dos párrafos del mensaje papal "para que, desde la oración, ayuden en el seguimiento de Jesús".
El mensaje del Papa
El Espíritu Santo mantiene alerta a la comunidad creyente y la instruye continuamente, llamándola a la conversión de estilos de vida, para que se oponga a la degradación humana del medio ambiente y manifieste esa crítica social que es, ante todo, testimonio de la posibilidad de cambio. Esta conversión consiste en pasar de la arrogancia de quien quiere dominar a los demás y a la naturaleza -reducida a objeto manipulable-, a la humildad de quien cuida de los demás y de la creación. "Un ser humano que pretende ocupar el lugar de Dios se convierte en el peor peligro para sí mismo" (Laudate Deum, 73), porque el pecado de Adán destruyó las relaciones fundamentales por las que vive el hombre: la que tiene con Dios, consigo mismo y con los demás seres humanos, y la que tiene con el cosmos. Todas estas relaciones deben ser, sinérgicamente, restauradas, salvadas, "reorientadas". No puede faltar ninguna. Si falta una, falla todo.
Esperar y actuar con la Creación significa, en primer lugar, aunar esfuerzos y, caminando junto con todos los hombres y mujeres de buena voluntad, contribuir a "repensar entre todos la cuestión del poder humano, cuál es su sentido, cuáles son sus límites. Porque nuestro poder ha aumentado frenéticamente en pocas décadas. Hemos hecho impresionantes y asombrosos progresos tecnológicos, y no advertimos que al mismo tiempo nos convertimos en seres altamente peligrosos, capaces de poner en riesgo la vida de muchos seres y nuestra propia supervivencia" (Laudate Deum, 28). Un poder incontrolado engendra monstruos y se vuelve contra nosotros mismos. Por eso hoy es urgente poner límites éticos al desarrollo de la inteligencia artificial, que, con su capacidad de cálculo y simulación, podría ser utilizada para dominar al hombre y la naturaleza, en lugar de ponerla al servicio de la paz y el desarrollo integral (cf. Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2024).+