Peregrinación Mariana Infantil: una animación para cuidar la alegría
- 27 de agosto, 2024
- Buenos Aires (AICA)
Fue por las calles de las cuatro vicarías arquidiocesanas porteñas. "Tenemos que ser custodios de la alegría cuidándonos, alentándonos, abrazándonos, agradeciendo", sintetizó Mons. Iván Dornelles.
"Con María, cuidamos la alegría", fue el lema de las Peregrinaciones Marianas Infantiles que, organizadas por la Vicaría Episcopal para Niños de la arquidiócesis de Buenos Aires, se llevaron a cabo el sábado 24 de agosto en las cuatro vicarías en las que está dividida esa jurisdicción eclesiástica.
Con sus pañuelos celestes en alto por las calles, marcharon los chicos cantando y llevando su alegría por los barrios porteños. En los puntos de llegada de las columnas de los peregrinitos, los esperaba el manto celeste de la Virgen: por debajo de él pasaban los chicos, sus familias, los catequistas y animadores, en un hermoso signo de bendición mariana.
La Vicaría Belgrano salió de la parroquia Nuestra Señora de las Mercedes (Echeverría 1371) y se dirigió a la parroquia Inmaculada Concepción de Belgrano (Vuelta de Obligado 2042). Presidió la misa monseñor Alejandro Giorgi, obispo auxiliar de Buenos Aires y vicario de Belgrano.
La Vicaría Centro salió de la parroquia Nuestra Señora de Montserrat (avenida Belgrano 1151) y llegó a la de Nuestra Señora de La Piedad (Bartolomé Mitre 1524). Presidió la misa monseñor Alejandro Pardo, obispo auxiliar de Buenos Aires y vicario de Centro.
La Vicaría Flores, por su parte, salió de la parroquia Corpus Domini (Albariño 256) y llegó a la parroquia San Pío X (Manuel Artigas 5261). Presidió la misa monseñor Pedro Cannavó, obispo auxiliar de Buenos Aires y vicario de Flores.
Y la Vicaría Devoto salió de la parroquia Dulcísimo Nombre de Jesús (Valdenegro 3611) y llegó a la parroquia María Reina (Ceretti 2622). Presidió la misa monseñor Iván Dornelles, obispo auxiliar de Buenos Aires, vicario de Belgrano y vicario para la Pastoral del Arzobispado de Buenos Aires.
Mates con la Virgen y el Negro Manuel
La animación previa ya es tradicional en las propuestas pastorales de la Vicaría de Niños. En esta ocasión, fueron protagonistas la Virgen María y el Negro Manuel -representados por muñecos- quienes, entre mate y mate, se pusieron de acuerdo en que lo más lindo que se puede hacer con los niños del mundo es enseñarles a ser hermanos y ser siempre alegres, "ser custodios de la alegría".
"La mayor alegría para mí -dijo el personaje de la Virgencita- es que los chicos visiten a sus abuelos, que te reconcilies si andás peleado con alguien, porque el amor de Dios es para todos".
En su homilía, monseñor Dornelles reforzó su exhortación a cuidar a los abuelos, a amigarse cuando se pelean, dar aliento en el camino, abrazar a la familia y los amigos, invitar a los amigos a ir a la catequesis y agradecer la presencia de Dios.
Lo que arrancó sonrisas y muchos seguidores fue el pedido del obispo de que todos siguieran la cuenta de TikTok de la Vicaría -@vicarianiok-, donde se comparten contenidos relacionados con las actividades de esa Pastoral, que se ocupa de los más pequeños del Reino en Buenos Aires.
Gesto solidario
Para esta peregrinación (y como siempre se hace también) se pidió la colaboración de los chicos y sus familias con pañales descartables, que serán donados a la Maternidad Sardá, el Hospital Piñero y el Hospital Gutiérrez.+