México: los obispos llaman a la presidenta electa a trabajar por la paz
- 4 de julio, 2024
- Ciudad de México (AICA)
Expresaron sus deseos de que la construcción de la unidad nacional sea una prioridad para la nueva jefa del poder ejecutivo, elegida en los comicios del pasado 2 de junio.
A un mes del proceso electoral realizado en junio de este año, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), integrada por los más de 120 obispos del país, reiteró que la Iglesia Católica ha felicitado a la virtual presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo, y a todos aquellos que también fueron elegidos para algún cargo popular.
Sin embargo, ahora llaman a la próxima presidenta de México para que dirija sus decisiones y primeras acciones hacia la construcción de la unidad nacional, hacia la inclusión de todos en el proyecto de nación democrática "que tenemos desde hace décadas, hacia el fortalecimiento y autonomía de los tres poderes del Estado, con todas sus instituciones, y hacia la vigencia plena del Estado de Derecho, en el respeto a los derechos humanos fundamentales".
En su pronunciamiento, la CEM no dejó de resaltar el hecho histórico de tener por primera vez a una mujer al frente del Poder Ejecutivo, reconociendo lo que de manera propia puede aportar la mujer a la sociedad, junto "con el aporte de pequeñas y grandes acciones de millones de mexicanos en su trabajo de cada día, también con la responsabilidad de los gobernantes y, sobre todo, debemos sumar los anhelos de las jóvenes generaciones, que heredarán lo mejor de México y se convertirán, pronto, en responsables de su presente".
En el mensaje, el arzobispo de Monterrey, monseñor Rogelio Cabrera López, y el obispo de Cuernavaca, monseñor Ramón Castro Castro, presidente y secretario general de la CEM, respectivamente, indicaron que la ciudadanía dio un ejemplo de civilidad democrática el pasado 2 de junio, tanto los que se sienten representados en los resultados como quienes expresaron otras opciones en las urnas y, especialmente, los que se han hecho cargo de la jornada electoral en cada una de las mesas de votación en todo el país, a quienes debemos expresar nuestra más amplia gratitud.
"Muchos ciudadanos podrán sentirse satisfechos; otros, por distintos motivos muy válidos, han vivido los resultados con frustración; pero, entre unos y otros, debe haber respeto para construir juntos nuestro futuro, ya que unos y otros formamos el mismo país", agregaron.
"Que no prevalezca -escribieron- el sentimiento de vencedores o vencidos, sino el de ciudadanos de la misma patria, que debemos construir con el talento de todos, sin exclusión. México debe ser tierra de libertad y oportunidades para todos, en un ambiente de justicia y paz que todos anhelamos".
Del mismo modo, los obispos llamaron a todos los mexicanos a ir más allá de la contienda electoral y colocarse ahora con ánimo y esperanza, con la conciencia de que el futuro de nuestro país necesita de todos, jóvenes y adultos, sociedad civil y fuerzas armadas, comunicadores y educadores, empresarios y lideres sociales, obreros y campesinos, profesionales, comerciantes y toda la clase laboral.
La declaración de la CEM recordó también que, "en nuestro documento 'Que en Cristo, Nuestra Paz, México tenga vida digna' (2010), afirmamos que 'la construcción de un México más justo y fraterno es tarea de todos'. Esta convicción sigue vigente hoy más que nunca, y nos llama a trabajar unidos por el bien común de nuestra nación, superando divisiones y construyendo puentes de diálogo y reconciliación".
Finalmente, resaltaron que, como Iglesia Católica, "expresamos nuestro compromiso con el diálogo, la cultura del encuentro y la reconciliación".+