Navidad: el Papa explica por qué los pesebres son tan importantes

  • 16 de diciembre, 2023
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
"El propósito del pesebre viviente es despertar en el corazón el asombro ante el misterio de Dios que se hizo niño", recordó este sábado el Santo Padre.

A una semana de la celebración de la Navidad, el Santo Padre recibió este sábado 16 de diciembre, en el Aula Pablo VI, a las personas que participarán del pesebre viviente en la Basílica de Santa María la Mayor, de Roma.

El pontífice explicó que el objetivo del pesebre viviente es “despertar en los corazones el asombro ante el misterio de Dios que se hizo niño" y, para esta Navidad, Francisco instó a pensar especialmente en Tierra Santa.

El Papa recordó que san Francisco de Asís quiso representar vívidamente el nacimiento de Jesús, para despertar en sus hermanos y en el pueblo “la emoción, la ternura ante el misterio de Dios, que nació de María en un establo y fue acostado en un pesebre”. Hace exactamente 800 años, el santo quiso dar concreción, representando el nacimiento de Cristo: “Ni un cuadro, ni una estatua, sino personas reales, para que la realidad de la encarnación quede clara”, dijo el Papa Francisco a unos 2.500 invitados, de Roma y de toda Italia, en la Sala de Audiencias del Vaticano.

Un segundo pensamiento fue para “nuestros hermanos y hermanas en Belén”, es decir, el Belén de hoy. “Y, por supuesto, se aplica a todos los habitantes de la tierra donde Jesús nació, vivió, murió y resucitó”, añadió Francisco: “Sabemos cuál es la situación, porque hay guerra, resultado de un conflicto que dura décadas. Por eso, su actuación debe vivirse en solidaridad con estos hermanos y hermanas que tanto están sufriendo. Para ellos, será una Navidad de dolor, de tristeza, sin peregrinos, sin celebración. No queremos dejarlos solos. Estamos cerca de ellos con la oración, con ayuda concreta y también con su Belén viviente, que recuerda a todos que el sufrimiento en Belén es una herida abierta para Medio Oriente y para el mundo entero. Pensemos en Tierra Santa en Navidad”.

Francisco concluyó deseando a todos que la Navidad de este año se viva “con fe y alegría”: “¡Que la fiesta sea testimonio del Evangelio!” y, con este deseo, los bendijo “a todos y a sus seres queridos desde el fondo de su corazón. ¡Feliz Navidad!".+