Fiesta de la Virgen del Pilar: España honró a su patrona en Zaragoza
- 12 de octubre, 2023
- Zaragoza (España) (AICA)
50.000 personas ofrecieron, este 12 de octubre, sus flores a la Virgen del Pilar. El cardenal portugués Américo Aguilar presidió la Eucaristía en el santuario de Zaragoza.
El cardenal Américo Aguilar, obispo de Setúbal (Portugal) y recién creado purpurado en el Consistorio del 30 de septiembre, presidió la misa en la basílica de Nuestra Señora del Pilar en Zaragoza, este 12 de octubre. A pesar de su origen portugués, es costumbre en la fiesta de Nuestra Señora del Pilar que una personalidad relevante de la Iglesia presida la celebración eucarística.
En su homilía, Aguilar comparó la histórica ofrenda de flores a la Virgen con una “escalera al Cielo”. Además, el purpurado portugués agradeció a los obispos su participación en la JMJ de Lisboa durante el pasado agosto, y pidió oraciones “por los jóvenes” y por la paz para Ucrania e Israel, “la tierra de Jesús”.
Fuera del santuario mariano, unas 50.000 personas depositaron sus flores en el manto a los pies de la Virgen del Pilar. Se calcula que en total serán unos 250.000 peregrinos los que la homenajearán a lo largo del día, los cuales se han organizado en 890 grupos, 76 más que en 2022, y desde muy temprano empezaron a movilizarse. El último turno pasará allí la noche y estará formado por voluntarios del ayuntamiento de Zaragoza.
Durante todo el día 30 jardineros, 64 auxiliares y otros 175 trabajadores coordinarán el buen acondicionamiento de las ofrendas, junto a 260 voluntarios y personal de Protección Civil, Cruz Roja, Bomberos, y de l Policía Local y Nacional.
Como curiosidad, en este 2023 se han inscrito 35 grupos procedentes del extranjero y 28, de otras comunidades autónomas. Ha jugado un papel destacado el país invitado de este año, Paraguay, quien ha convocado a 150 personas con sus trajes tradicionales y con la bandera floral de su patria. También, como es costumbre, cinco aviones F18 de la base aérea de Zaragoza han sobrevolado dos veces la basílica en torno al mediodía, tras participar del desfile militar en Madrid.
La historia de la Virgen del Pilar
El 12 de octubre, celebramos a Nuestra Señora, la Virgen del Pilar, una de las devociones más antiguas y populares de España y de Latinoamérica. La Virgen del Pilar es Patrona de la Hispanidad, de la ciudad de Zaragoza y también de la Guardia Civil.
Miles son los peregrinos de todas las nacionalidades que acuden cada año a rezar a la Virgen del Pilar en Zaragoza, donde se encuentra su basílica, una de las más antiguas de España. En su interior se encuentra la columna sobre la cual la Virgen se apareció al Apóstol Santiago durante la evangelización de la península, en el año 40 después de Cristo, que es la aparición mariana más antigua reconocida por la Iglesia.
Tal y como se recoge en unos documentos del siglo XIII que se conservan en la catedral de Zaragoza, la historia de la Virgen del Pilar se remonta a la época inmediatamente posterior a la Ascensión deNuestro Señor Jesucristo. Ya en el año 40 de nuestra era, los Apóstoles habían empezado a cumplir la misión de predicar el Evangelio.
Los documentos dicen textualmente que Santiago, "pasando por Asturias, llegó con sus nuevos discípulos, a través de Galicia y de Castilla, hasta Aragón, el territorio que se llamaba Celtiberia, donde está situada la ciudad de Zaragoza, en las riberas del Ebro". El Apóstol fue viendo que aquella civilización era increíblemente dura. Era muy difícil hacer llegar a esas gentes las palabras del Evangelio, por lo que Santiago comenzó a desanimarse al ver que su esfuerzo no da frutos.
Pero en la noche del 2 de enero del año 40, Santiago, que se encontraba descansando con sus discípulos junto al río Ebro, de repente "oyó voces de ángeles que cantaban 'Ave, María, gratia plena', y vio aparecer a la Virgen Madre de Cristo, de pie sobre un pilar de mármol". La Santísima Virgen, le pidió al Apóstol que se le construyese allí una iglesia, con el altar en torno al pilar donde estaba de pie, y prometió que permanecería en ese sitio hasta el fin de los tiempos, "para que la virtud de Dios obre portentos y maravillas por mi intercesión con aquellos que en sus necesidades imploren mi patrocinio".
Acto seguido, esapareció la Virgen y quedó ahí el pilar. El Apóstol Santiago y los otros de ocho testigos comenzaron a edificar una iglesia en aquel sitio. Pero antes que estuviese terminada, Santiago ordenó presbítero a uno de sus discípulos para servicio de la misma, la consagró y le dio el título de Santa María del Pilar, y luego regresó a Judea.
Años más tarde, el Papa Clemente XII, consciente de esa devoción generada desde entonces, instaura el 12 de octubre como día de la Virgen del Pilar. Y el 12 de octubre de 1492 las naves de Cristóbal Colón avistan por primera vez América, y así queda patente que hay mundo más allá de Hispania. Por este motivo, Nuestra Señora la Virgen del Pilar es Patrona de la hispanidad ,porque se puso bajo su manto la evangelización de las nuevas tierras. La devoción del pueblo por la Virgen del Pilar es tan profunda entre los españoles y desde épocas tan remotas, que la Santa Sede permitió el establecimiento del Oficio del Pilar, en el que se consigna la aparición de la Virgen del Pilar como "una antigua y piadosa creencia".
La tradición de la ofrenda de flores
La ofrenda de flores tuvo un nacimiento muy modesto. La historia recoge que, tras ser terminada la nueva basílica del Pilar de Zaragoz,a en 1872, todos los días 2 de enero y 12 de octubre se llenaba de flores el camarín de la Virgen en la Capilla.
A mediados de los años 50 del siglo pasado, el concejal Manuel Rodeles, presidente de la Comisión de Festejos del Ayuntamiento, propuso hacer algo similar a lo que se hacía en Valencia con la Ofrenda a la Virgen de los Desamparados. La idea salió adelante y, en uno de los muros de la basílica, se dispuso un pequeño altar con una réplica de la imagen de la Virgen del Pilar. Para animar a esa primera participación, se regalaron 20.000 claveles a los ciudadanos. El manto y el altar quedaron rápidamente cubiertos. A partir de entonces, la tradición comenzó a crecer y crecer, e incluso en 1964 se creó otra, con frutos de la tierra.
En 1998, el cineasta Bigas Luna propuso que la Virgen se situara sobre una gran columna en el centro de la plaza del Pilar. De esta manera, el número de participantes podría ser mayor y, a su vez, el manto estar confeccionado por más flores. El cambio supuso una revolución y, a día de hoy, la ofrenda de flores es el acto más multitudinario de cuantos se celebran en Zaragoza. Miles y miles de 'mañicos' se visten cada año de baturros y baturras para llevar sus flores hasta los pies de la Virgen.+