La Legión de María celebró los 102 años de su fundación

Con una misa en la catedral metropolitana de Buenos Aires, la Legión de María agradeció a Dios por el aniversario y renovó su compromiso "con la evangelización de nuestra ciudad".

La Legión de María celebró, en la catedral metropolitana de Buenos Aires, la misa en acción de gracias por los 102 años de su fundación, presidida por el director espiritual de la Legión de María arquidiocesana, presbítero José Ignacio Ferro Terrén.

“María Santísima nos invita como legionarios al apostolado, que es arduo, que es difícil, que muchas veces es cansador, por eso pedimos tener la fortaleza que tuvo María al pie de la cruz para perseverar en nuestra tarea”, expresó Ferro Terren en su homilía.

“Renovemos, con ayuda de la gracia, el verdadero fervor apostólico al que nos invita el Papa Francisco: ser apóstoles en el mundo de hoy, llevando la alegría del Evangelio”, concluyó el sacerdote.

Durante la celebración eucarística, la Legión de María renovó su compromiso con la evangelización de la Ciudad, a través del contacto personal en cada trabajo legionario, ya sea en un hospital, un geriátrico, llevando la imagen de la Virgen por las casas o misionando en el barrio, “para que la presencia de Jesús por medio de María llegue a cada habitante de nuestra ciudad de Buenos Aires”, expresaron los legionarios.

Una historia centenaria
El 7 de septiembre de 1921, en la ciudad de Dublín, Irlanda, por iniciativa del siervo de Dios Frank Duff, nace la asociación, inspirada en las legiones romanas que luchaban para conquistar el mundo y, por ello, “los legionarios buscan conquistar el mundo para Cristo; su arma es la oración y su estandarte, María, la Reina de los Apóstoles y de quien toman el nombre”.

Así, Duff, con un grupo de personas, dio vida a la Legión luego de participar de la Asociación de San Vicente de Paul, de donde tomó pautas y costumbres que luego aplicó en la nueva obra. El también siervo de Dios Alfonso Lambe extendió la Legión a América y la venerable Edel Quinn la llevó a África. Hoy, el movimiento está presente en los cinco continentes y en cinco provincias argentinas.

Hoy, tanto su fundador Frank Duff, como Edel Quinn y Alfonso Lambe se encuentran en proceso de canonización.

La Legión de María, según la definen sus integrantes, es “una organización de laicos en la Iglesia Católica que, en unión con María, trabaja en el crecimiento espiritual, en la oración, en la ayuda al prójimo y en ayudar en las necesidades de la parroquia”. Tiene miembros activos y miembros auxiliares que “prestan un servicio en la oración”.

Los objetivos de la Asociación son la santificación de sus miembros mediante la oración y la participación en la misión evangelizadora a través del apostolado directo, especialmente entre aquellos que están lejos física y/o espiritualmente de la Iglesia. Así, realizan visitas a domicilio a los enfermos, a los presos y a las familias; imparten la enseñanza del catecismo en las parroquias; contribuyen a la formación religiosa de los jóvenes; dan cursos de alfabetización para emigrantes; brindan apoyo a drogodependientes y chicas de la calle; organizan la celebración de la liturgia de la Palabra y de encuentros de oración en los lugares sin sacerdotes; etcétera. 

Juan Pablo II dijo que este movimiento “ayuda a cada uno de los hombres, que es imagen de Cristo, con el espíritu y la solicitud de María”; Pablo VI la definió como “un instrumento de asombrosa eficacia para la edificación y extensión del reino de Dios”; y Juan XIII, como la institución que “presenta el verdadero semblante de la Iglesia”.+