Nueve de Julio: santo Domingo de Guzmán, modelo para una comunidad evangelizadora
- 15 de agosto, 2023
- Nueve de Julio (Buenos Aires) (AICA)
El obispo Ariel Torrado Mosconi presidió las fiestas en honor del patrono de la diócesis, en las que recordó que este santo "sigue iluminando el camino evangelizador y mostrando un estilo misionero".
El obispo de Nueve de Julio, monseñor Ariel Torrado Mosconi, presidió las fiestas en honor de santo Domingo de Guzmán, durante las que destacó que el santo patrono de la catedral y de la diócesis "sigue iluminando el camino evangelizador y mostrando todo un estilo misionero a la Iglesia actual".
A lo largo del mes, la comunidad nuevejuliense celebra sus patronales. Los festejos comenzaron el viernes 4 de agosto, con una jornada penitencial y de reconciliación, durante la que los fieles pudieron participar del sacramento de la Reconciliación en el templo catedralicio.
Los días 5, 6 y 7 de agosto, monseñor Torrado Mosconi presidió y predicó el triduo de preparación. El sábado 5, en plaza Italia, frente al santuario diocesano Nuestra Señora de Fátima, el grupo de adoradores eucarísticos organizó un rosario meditado, del que participaron también niños de la catequesis. Luego, se caminó en procesión, rezando y cantando por el centro de la ciudad, hasta la catedral.
La procesión de la fiesta patronal tuvo la adhesión espontánea de transeúntes y vecinos, que salían de sus casas al paso de la imagen de santo Domingo de Guzmán, sorprendidos por la manifestación de fe.
En la homilía de la misa, el obispo diocesano, a la luz de los textos bíblicos de la fiesta de la Transfiguración del Señor, se refirió a la necesidad e importancia de la oración, vivida como encuentro con Dios y proponiendo a María, santo Domingo y la Iglesia como “pedagogos” de la oración. “Cada comunidad cristiana es -y debe ser cada vez más- esa montaña, lugar, espacio, para el auténtico encuentro con Dios”, sostuvo.
El domingo 6 al mediodía, en las instalaciones de la capilla Sagrado Corazón de Jesús, los integrantes de diversos grupos de la comunidad parroquial,junto con sus familias, compartieron el almuerzo que, según monseñor Torrado Mosconi al momento de la bendición, “busca hacernos sentir familia y estrechar los lazos fraternos que nos hacen crecer en comunión”.
Por la tarde, en la plaza central de la ciudad, se rezó el santo rosario y luego se celebró la misa solemne, presidida por el el obispo diocesano y concelebrada por los sacerdotes de la ciudad, en en un templo colmado de fieles y en la cual estuvieron también las autoridades locales, encabezadas por el intendente, Mariano Barroso.
En la homilía, especialmente dirigida a los agentes pastorales presentes, monseñor Torrado Mosconi expresó: “Santo Domingo, con el testimonio de su estilo fiel al Evangelio y su ardor misionero, nos invita e impulsa a ser evangelizadores audaces y creyentes comprometidos con el bien común de la ciudad terrena también”.
El lunes 7, coincidiendo con la celebración de san Cayetano, a primera hora de la tarde, tuvo lugar en el barrio Diamantina, de la periferia sur de la ciudad, la procesión con la imagen del santo y la participación de una multitud de devotos, que rezaron y cantaron fervorosamente, siguiendo la manifestación de fe.
La misa tuvo lugar frente a la capilla dedicada al santo patrono del pan y del trabajo. En la ocasión, el obispo también bendijo la cruz del campanario, recientemente colocada. En la homilía, partiendo de la simbología del pan, el prelado recordó: “El pan evoca todo lo necesario para una vida digna, el pan es sagrado. Nuestro compromiso como cristianos es trabajar por compartir el pan, que hace de la vida de cada hermano una existencia digna. El pan de la fe, la esperanza y el amor, el pan del trabajo, la educación y la salud, el pan de la paz, la justicia y la solidaridad”.
El martes 8, solemnidad de santo Domingo, monseñor Torrado Mosconi invitó al obispo emérito de la diócesis, monseñor Martín de Elizalde OSB a presidir la Eucaristía, que fue concelebrada por el vicario general, presbítero Carlos Tibberi, y los sacerdotes locales.
En la homilía, monseñor Elizalde, partiendo de los textos bíblicos de la fiesta, exhortó a vivir la existencia cristiana como un don y un compromiso, que brota del bautismo y se vive en la comunión de la Iglesia, sostenidos por la intercesión y el ejemplo de los santos, que culmina en la misión como testimonio y compromiso renovado.
Las celebraciones continuarán a lo largo del mes, con otras actividades y acciones pastorales, entre las que destacan la entronización de dos antiguas imágenes de san Roque y santa Rosa de Lima recientemente restauradas, que estaban en el retablo de esa iglesia matriz y que ahora se han recuperado para la veneración de los fieles.+