La diócesis del Alto Valle del Río Negro tiene un nuevo sacerdote
- 4 de mayo, 2023
- General Roca (Río Negro) (AICA)
La catedral Nuestra Señora del Carmen, en la ciudad de General Roca, fue escenario este 1º de mayo de la ordenación sacerdotal de Julio Alexis Oser. Presidió la celebración Mons. Alejandro Benna.
La catedral Nuestra Señora del Carmen, en la ciudad de General Roca, fue escenario este 1º de mayo de la ordenación sacerdotal de Julio Alexis Oser.
Monseñor Alejandro Pablo Benna, cuarto obispo diocesano del Alto Valle del Río Negro, presidió la celebración, que fue concelebrada por monseñor Fernando Martín Croxatto, obispo de Neuquén y monseñor Néstor Hugo Navarro, obispo emérito de la diócesis rionegrina.
Participaron presbíteros y diáconos, familiares y amigos de Alexis, y otros miembros de la comunidad que se acercaron para festejar este acontecimiento. Posteriormente, el flamante sacerdote celebró su primera misa en la capilla Virgen Misionera.
“Alexis, trabajá para Dios”, le dijo monseñor Benna en la homilía, invitando a “discernir juntos qué es lo que quiere Dios”, para lo cual destacó que hace falta oración y silencio: “Tiene que ser diaria la oración para poder ser dóciles a Dios”.
También explicó que “ser discípulo no es simplemente adherir a una doctrina sino entablar una relación personal y vital con su Maestro”. Refiriéndose a la lectura de la profesión de fe de pedro, indicó que “por eso Jesús pide a Pedro una declaración cabal y sin dudas de su amor. Él cumple y se compromete con la condición más importante, que es vivir en el amor. Por eso Jesús le encarga la misión de apacentar a su rebaño”.
Sobre Julio Alexis Oser
Julio Alexis Oser nació en la ciudad de Catriel, provincia de Río Negro, el 29 de noviembre de 1995. Sus padres, Adriana Sepúlveda y Julio Oser, lo criaron allí junto a sus hermanos Lucas y Carolina.
A los 7 años empezó a caminar en la fe por invitación de una tía y de una religiosa, la hermana María de las Nieves de la Congregación de las Hermanas de Nuestra Señora del Monte Calvario, quienes lo acercaron a la capilla “Sagrado Corazón de Jesús”, en su barrio.
Allí conoció la Infancia y Adolescencia Misionera, que despertó en él un gran amor por Jesús y una atracción especial por la misión. Después de recibir en esa capilla su primera comunión, comenzó a participar como monaguillo y misionero en la parroquia.
En plena catequesis de confirmación, se despertó su llamado vocacional al sacerdocio, por lo que empezó a misionar en un asentamiento ubicado a las orillas del río Colorado, en el barrio Santa Cruz.
Ese primer llamado al servicio, queriendo ser útil a la gente, fue creciendo hasta que un día, acompañando a un sacerdote y un seminarista a visitar enfermos en el hospital de Cinco Saltos, se encontró con un joven con leucemia en fase terminal. En dicha visita, el cura a quien acompañaba le dio al joven Oser, para que le regalara a ese joven, una “Vida de San Camilo”. Después, Jullio Alexis fue testigo de cuando el joven recibió el sacramento de la unción y quedó con una profunda paz.
Al salir del hospital, el llamado fue más fuerte, y decidió dejarse acompañar en el discernimiento por el cura párroco de Catriel, el presbítero Temer Mukled, quien lo presentó al obispo y después al seminario. Alexis afirma que su vocación “nació en la misión y entre los enfermos”.
Con 18 años, ingresó al Seminario Jesús Buen Pastor, en Río Cuarto (Córdoba), donde cursó el año introductorio junto a otros seminaristas. Después se trasladó a la ciudad de Buenos Aires, para continuar con su formación sacerdotal en el Seminario Patagónico San Pedro y San Pablo, donde se formó desde 2015 a 2021.
Estando en dicho seminario, hizo sus experiencias pastorales en el santuario San Pantaleón (del barrio de Mataderos), en la parroquia San Juan el Precursor (de Saavedra) y en la parroquia San Bernardo (en Villa Crespo). Durante el año 2019, vivió en la parroquia Nuestra Señora del Carmen, de la ciudad de General Roca, donde hizo su año de experiencia pastoral.
El 25 de mayo del 2022 fue ordenado diácono en su ciudad natal. Y fue destinado a vivir su diaconado también en la parroquia del Carmen de General Roca, acompañando a sus diez comunidades; y también colaborando, a nivel diocesano, con la Pastoral de Juventud y el Instituto Nuestra Señora de Fátima, en Cipolletti.+