La diócesis de Merlo-Moreno peregrinó a Luján para dar gracias por sus 25 años
- 8 de noviembre, 2022
- Luján (Buenos Aires) (AICA)
Participaron cerca de 3.000 personas. El administrador diocesano, monseñor Oscar Miñarro, destacó que este aniversario "tiene que ver con una especie de fruto hermoso del caminar".
Alrededor de 3.000 personas participaron el domingo 6 de noviembre de la peregrinación diocesana de Merlo-Moreno al santuario de Luján, para agradecer por el 25° aniversario de vida de esa diócesis. Una vez llegados a la basílica, se celebró la misa que fue presidida por el administrador diocesano, monseñor Oscar Eduardo Miñarro, y concelebrada por el presbítero Fabián Sáenz, vicario general para Merlo-Moreno; y el presbítero Walter Vaca, vicario para la Educación.
En la homilía, monseñor Miñarro expresó: “Le damos gracias como hijos a los pies de la Madre. Mirarla a la Virgen y decirle a ella aquí tienes a tus hijos. Venimos a dar gracias por caminar 25 años en Merlo-Moreno”.
“Los 25 años que nosotros celebramos este año tienen que ver con una especie de fruto hermoso del caminar. Nuestra diócesis puede decir que este año fue recogiendo frutos de tantos arroyos y fuentes”; continuó.
Asimismo, el prelado recordó al fallecido obispo monseñor Fernando Carlos Maletti y destacó: “Tuvimos la gracia de que Dios nos regale un hermano, un padre, que vino con el lema “Consuelen a mi pueblo”. Y en este consuelo él mismo fue consuelo de todos nosotros y a su caminar nos invitó a volver a soñar, a volver a abrir las puertas”.
“La diócesis es en verdad una casa para todos aquellos hermanos y hermanos que fueron llegando por distintos motivos”, continuó.
Por otra parte, el actual administrador diocesano se refirió a monseñor Juan José Chaparro CMF, recientemente designado por el papa Francisco como nuevo obispo de esa diócesis y que asumirá el gobierno pastoral el próximo 12 de diciembre.
“Ojalá que el padre Juan José se sienta en medio de nosotros como un hermano que es recibido en su casa y que caminando en medio de nuestros barrios pueda animarnos a estos sueños que tenemos de caminar juntos, hacer una Iglesia en salida, una Iglesia celebrativa, y en la que, los que están en el barrio, puedan acercarse y encontrar un lugar”, manifestó.
“Queremos ser una Iglesia que mira cada problemática y que quiere estar acompañando a cada una de las realidades, a los lugares donde se tomaron tierras y cómo acompañar a esos hermanos y hermanas en la situación que viven; a los jóvenes y adultos que viven en situaciones problemáticas de adicción, y acompañar a los barrios que van creciendo, para que siga habiendo catequesis, misión”, subrayó.
Finalmente, monseñor Miñarro animó a que “nos vayamos bendecidos por el amor de Dios y el amor de los hermanos”.+