Mineros mexicanos: Animan a seguir rezando por "un milagro"
- 10 de agosto, 2022
- Ciudad de México (AICA)
Tras el derrumbe ocurrido el pasado 3 de agosto en una mina de Coahuila, los obispos mexicanos invitaron a los fieles a rezar porque vuelvan sanos y salvos a sus hogares.
“Suplicamos a Dios que nos dé esperanza y nos conforte en estos momentos de angustia para que nos conceda que vuelvan sanos y salvos con bien a sus hogares”, indica el comunicado publicado por la Conferencia del episcopado mexicano (CEM), el 4 de agosto, al día siguiente del accidente en el que diez trabajadores quedaron atrapados en una mina de carbón.
En la misiva, los obispos aseguraron sus oraciones y consuelo a las familias de los mineros: “Rogamos por la vida de cada uno de los mineros atrapados y los ponemos bajo la intercesión de nuestra Madre, la Virgen María de Guadalupe”.
El pasado sábado, en que se cumplieron tres días del derrumbe registrado en una mina de carbón de Agujita Sabinas (Coahuila), el sacerdote de la comunidad, presbítero Teodoro Durán Ramírez, celebró una misa para los familiares de los diez mineros que quedaron atrapados, en la que les pidió no perder la fe.
“Nadie sabe, hermanos, como dice el Evangelio, el día ni la hora. Ellos, como cualquier trabajador, se levantaron temprano el miércoles, y como cualquier trabajador se presentaron en el área de su trabajo”, señaló el párroco de Nuestra Señora de Guadalupe, quien, sin embargo, les pidió no perder la fe en que puedan ser rescatados con vida.
El incidente se registró a las 13.35 del miércoles, provocado por el reblandecimiento de las paredes de la mina, la cual estaba comunicada con tres pozos inundados. Hasta el momento, las brigadas de rescate están haciendo lo humanamente posible para traer con vida a los mineros a la superficie.
Desde que se dio a conocer el lamentable suceso, el obispo de Piedras Negras, monseñor Alonso Gerardo Garza Treviño, se presentó en la mina para acompañar espiritualmente a los familiares de los trabajadores, ofrecerles todo el apoyo de la Iglesia Católica y pedir a Dios para que permita a los mineros atrapados regresar con bien a su hogar.
Asimismo, varios sacerdotes de la diócesis de Piedras Negras acudieron a la zona de desastre, donde instalaron una capilla de oración improvisada para que la gente pudiera reunirse a orar. Aunque, debido a los intensos calores, la capilla fue desmontada, y habitantes de la zona facilitaron un lugar muy cerca de la mina para que los feligreses lo tuvieran como espacio de oración permanente.
Las operaciones de rescate llevan más de 150 horas, en las que unos 652 operadores trabajan incesantemente en el bombeo de agua de 3 de los pozos de acceso al lugar del accidente, mientras con siete perforadoras y dos drones submarinos se sigue tratado de localizar a los mineros. La Protección Civil mexicana indicó que además de estos elementos, se cuenta con 37 vehículos, cinco ambulancias, tres transformadores y un comedor comunitario.
Aún no se tiene noticias no contactos directos con los mineros. El pasado lunes las autoridades mexicanas ingresaron un dron acuático para evaluar las condiciones de la mina con la intención de que ingresaran buzos rescatistas al lugar. Sin embargo, en el proceso de preparación en el pozo 4 se encontraron con columnas de madera que impidieron la inmersión del equipo. La presencia de agua también obligó a determinar que no existen las condiciones para el ingreso de equipos. Mientras tanto se continua el bombeo de agua en los 4 pozos de acceso al lugar del incidente.
En el lugar hay un despliegue de 557 elementos, incluyendo 357 federales, como 230 de la Secretaría de la Defensa, 2 de la Marina, 32 de la Guardia Nacional, 9 de Protección Civil, y otros de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y secretarías de Estado. Igualmente, se han hecho presentes un centenar de voluntario de ONG y parroquias aledañas.+