La Revista Familia Cristiana celebra con el Papa su 90 cumpleaños

"Superar la autorreferencia para una comunicación más profunda con las personas", dijo Francisco a la revista de los padres paulinos a los que recibió en el Vaticano.

“Para conocer a los interlocutores de su misión y acercarse a ellos, el comunicador debe hacer un camino de 'salida', cambiando de actitud y de mentalidad si es necesario”, aconsejó este sábado 21 de mayo el papa Francisco a la representación de los directivos y lectores, encabezada por el editor padre Stefano Stimamiglio del semanario Familia Cristiana, recibida en el Aula Pablo VI con motivo del 90 aniversario del nacimiento de la revista.

La comunicación “es un ejercicio más profundo, que pone de manifiesto la autorreferencialidad. Superar la autorreferencialidad para mirar hacia un horizonte más amplio es indispensable en este momento de cambio de época”, exhortó el pontífice.

En cuanto a la relación con los lectores, para mantenerse viva incluso con la transformación digital, el Papa recordó que “no se puede confundir un mero contacto con un signo de diálogo e interacción, o un simple intercambio de mensajes con una verdadera comunicación”. 

El Papa comparó "la revista católica más difundida en Italia" de los paulinos con "una buena abuela, que vio mucho y a tantos y adquirió sabiduría". Luego recordó la principal línea editorial de los paulinos:

“Estar atentos a las relaciones como clave de la práctica comunicativa y a las 'redes' como lugares de creación colaborativa de significados y contenidos; una tendencia a buscar nuevas formas de presencia y acción, ligadas no tanto a los medios sino más bien a la cultura y a la nueva gramática de la comunicación; y al servicio de todo el pueblo de Dios, especialmente de los hombres y mujeres que viven en los suburbios de hoy. Esta línea es siempre válida, y por supuesto debe actualizarse según las grandes directrices de la evangelización”. 

Hoy, prosiguió el Santo Padre, “se abren ante nosotros dos caminos en particular: el camino de la fraternidad y el camino de la ecología integral. Debemos seguir estos caminos, pero el método sigue siendo el mismo: el diálogo y la escucha, que nos permiten cultivar las relaciones. En cuanto al diálogo, es importante entender que no puede reducirse a un intercambio de datos o información, y que la relación con el otro no puede limitarse a una conexión”.+