El Papa viaja este sábado a Malta para reforzar la acogida a los migrantes
- 30 de marzo, 2022
- Ciudad del Vaticano (AICA)
"Ser peregrino tras las huellas del apóstol Pablo que fue acogido allí con gran humanidad tras naufragar en el mar camino a Roma", indicó hoy el Santo Padre.
El papa Francisco visitará Malta el próximo 2 y 3 de abril para clamar contra la política de 'puertos cerrados' que impide a los barcos de rescate desembarcar a los migrantes en la isla que, por su posición en el Mediterráneo es uno de los puntos de destino, y para reforzar la necesaria acogida de estas personas.
“Este viaje apostólico, expresó el Santo Padre durante la audiencia general de hoy, será una oportunidad para ir a la fuente del anuncio del Evangelio, para conocer de primera mano una comunidad cristiana con una historia vibrante que se remonta a miles de años, para conocer a los habitantes de un país que se encuentra en el centro del Mediterráneo y en el sur del continente europeo, que hoy está aún más comprometido con la acogida de tantos hermanos y hermanas que buscan refugio”, concluyó el Papa.
Según la agenda que ublicó el Vaticano, Francisco pronunciará seis discursos en dos días en los que, además de la capital La Valeta, visitará las ciudades de Rabat, Floriana, Halfar y Gozo.
Este viaje –que estaba previsto para mayo del 2020 y tuvo que ser aplazado por la pandemia – constituirá su primer viaje internacional en 2022.
Durante su visita de dos días a Malta, se encontrará con “un paisaje totalmente diferente al que vio Benedicto XVI hace doce años”. Así lo afirmó el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, en una conferencia online con periodistas, precisando que el viaje apostólico será breve pero intenso.
Etimología del nombre de Malta
Bruni recordó que el nombre “Malta”, entre las hipótesis etimológicas, se cree que proviene de Malet, que en fenicio o hebreo significa refugio, asilo. En esta visita, Francisco se reunirá con refugiados y náufragos que se encuentran en un centro de acogida.
Esta isla en el corazón del Mediterráneo, sede de un Estado y encrucijada de pueblos, vio naufragar a san Pablo cuando se dirigía a Roma como prisionero. Esto le permitió predicar a Cristo y su Evangelio.
La isla recibió dos visitas de san Juan Pablo II, en 1990 y 2001, y una de Benedicto XVI en abril de 2010, con motivo del 1950 aniversario del naufragio del apóstol en la isla en el año 60.
El viaje de Francisco estaba previsto para mayo de 2020, pero se pospuso a causa de la pandemia. Ahora, además del tema inicial de la acogida, en este bastión a 80 kilómetros de Italia y a poco más de 200 kilómetros de África, en los seis discursos previstos el Papa podría implorar a Dios por la paz y el fin de la agresión de Rusia a Ucrania.
Lema
No es casualidad que el logotipo de la visita elegido hace dos años sea una frase de los Hechos de los Apóstoles: “Nos mostraron una bondad inusual”, y presenta las manos señalando hacia la Cruz desde un barco a merced de las olas. Las manos representan un signo de la aceptación del cristiano hacia su prójimo y de la ayuda a los que están en dificultad, abandonados a su suerte. El barco recuerda la dramática historia del naufragio del apóstol Pablo en la isla de Malta y la acogida que los malteses dieron al Apóstol y a los náufragos.
Programa de la visita
El sábado, a su llegada, el Papa será recibido por el presidente, el primer ministro y las autoridades, en el edificio civil que fue el palacio de los Grandes Maestros de los Caballeros de Malta. Por la tarde habrá una reunión de oración en el Santuario Nacional de Ta’Pinu, en la cercana isla de Gozo.
El domingo, el Santo Padre irá a la gruta de Rabat, destino de fieles y peregrinos, donde el apóstol Pablo encontró refugio. La cueva fue adaptada con un ascensor para que Francisco pueda llegar hasta la capilla.
Poco después, habrá una Misa en la Piazzale dei Granai, con paseos en papamóvil. No están excluidas las reuniones sin previo aviso, ya que también hay una comunidad de ucranianos en la isla.
El viaje finalizará el domingo por la tarde tras un encuentro con migrantes y refugiados en el centro San Juan XXIII. El viaje terminará con el regreso a Roma alrededor de las 20.+