Mons. Colombo: El gesto de María que anticipó la misión de los catequistas
- 21 de diciembre, 2021
- Mendoza (AICA)
El arzobispo de Mendoza afirmó que el encuentro de la Virgen con Isabel sirve para entender que "lo nuestro es encontrarnos primero con Cristo y después comunicarlo en la alegre fiesta de la Navidad".
El arzobispo de Mendoza, monseñor Marcelo Daniel Colombo, presidió la Eucaristía desde el convento Nuestra Señora del Rosario, de la localidad mendocina de Guaymallén, donde reflexionó sobre las lecturas de este domingo, al que consideró “la puerta de la Navidad”.
Tras referirse a la sorprendente profecía del profeta Miqueas, hizo referencia a la carta a los hebreos, en la que el Señor propone el cumplimiento de la voluntad que Jesús hace respecto de su Padre: “Aquí estoy vengo para hacer tu voluntad”.
“Finalmente en el evangelio nos alegran también con su diálogo, entusiasta, María e Isabel, sobre todo María llega con el don de su servicio e Isabel responde con la alabanza y el reconocimiento del Salvador que ha hecho su pequeño Juan en el vientre”, puntualizó.
“De esta alegría de estas dos mujeres, de la sencillez de estas dos mujeres, podemos decir que hemos vivido y seguiremos viviendo los hombres, toda la humanidad, porque en ella se da la concreta aceptación del don de Dios en María y el reconocimiento que el hombre hace de ese don, que es para nuestro bien, de parte de Isabel”, identificó.
El arzobispo mendocino afirmó que “el diálogo entre María e Isabel nos hace pensar en la sencillez de María que no reparó en acompañar el embarazo de su prima apenas tuvo noticia se ello; pero, sobre todo, nos invita a considerar la importancia de conectar alegría, buena noticia y servicio como parte del legado que el Cristo nos hace a todos los hombres y que en María ha encontrado su primera realización”.
“Podemos decir que María con esa visita, con ese gesto de acercarse a los hermanos en Isabel, anticipó largamente la misión de los catequistas; ella hace, entonces, con su vida la primera catequesis”, agregó.
Monseñor Colombo señaló que a raíz de que se acerca la Navidad “seguramente estaremos tomados por otras prisas, por otros apuros; quizás los preparativos de la cena, quizás la recepción de gente querida. Pero volvamos a la prisa de María que va a servir a Isabel, para entender que lo nuestro es encontrarnos, primero, con Cristo y después comunicarlo en la alegre fiesta de la Navidad”.
“Que en María catequista, que en Isabel adoradora que alaba a Dios en el vientre de María, nos sintamos también urgidos a dar de lo nuestro, testimoniar a Jesús adorarlo, alabarlo y servirlo en los hermanos”, concluyó.+