El Papa a la FAO: Superar la fría lógica del mercado y fortalecer la de la solidaridad
- 15 de octubre, 2021
- Ciudad del Vaticano (AICA)
Mensaje al director general de la FAO con motivo del Día Mundial de la Alimentación
“La lucha contra el hambre nos obliga a superar la fría lógica del mercado, centrada ansiosamente en el mero beneficio económico y en la reducción de los alimentos a una mercancía como muchas otras, y fortalecer la lógica de la solidaridad”, advirtió este viernes 15 de septiembre el papa Francisco en el mensaje que envió a Qu Dongyu, director general de la FAO, con motivo del Día Mundial de la Alimentación.
En su mensaje el Papa afirma que "vencer el hambre de una vez por todas" es "uno de los mayores desafíos de la humanidad" y es "un objetivo ambicioso". Recordó que la Cumbre de la ONU sobre sistemas alimentarios el pasado 23 de septiembre destacó la urgente necesidad de soluciones innovadoras para transformar la forma en que producimos y consumimos.
Un compromiso que no puede posponerse, escribe el Papa, citando luego el tema de la Jornada 2021: “Nuestras acciones son nuestro futuro. Mejor producción, mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor”.
La temática propuesta este año por la FAO subraya la necesidad de una acción conjunta para que todos tengan acceso a una dieta que garantice la máxima sostenibilidad ambiental y que además sea adecuada y a un precio asequible. Cada uno de nosotros tiene un papel que desempeñar en la transformación de los sistemas alimentarios en beneficio de las personas y del planeta, y “todos podemos colaborar para el cuidado de la creación, cada uno con su propia cultura y experiencia, sus propias iniciativas y habilidades".
En el mundo los problemas de hambre y obesidad
Hay una paradoja en el mundo, señala Francisco en el mensaje, con respecto al acceso a los alimentos: si más de tres mil millones de personas no pueden contar con una dieta nutritiva, casi dos mil millones más tienen sobrepeso o sufren los efectos de una mala nutrición. Y un estilo de vida sedentario. Por tanto, para proteger la salud de todos, es necesario “cambiar a todos los niveles” y reorganizar los sistemas alimentarios en su conjunto. Y el Papa sugiere cuatro áreas de acción: en el campo, en el mar, en la mesa y en la reducción de las pérdidas y el desperdicio de alimentos.
Nuestros estilos de vida y prácticas de consumo cotidianas influyen en la dinámica global y ambiental, pero si aspiramos a un cambio real, debemos instar a productores y consumidores a tomar decisiones éticas y sostenibles y sensibilizar a las generaciones más jóvenes del importante papel que desempeñan para hacer realidad un mundo sin hambre. Cada uno de nosotros puede brindar su aportación a esta noble causa,
La contribución fundamental de los pequeños agricultores
La crisis mundial desencadenada por el Covid-19 ofrece, prosigue el Papa, la oportunidad de cambio para la que es fundamental y precioso el aporte de los pequeños productores a los que "es necesario facilitar" el acceso a las innovaciones del sector agroalimentario útiles para " fortalecer la resistencia al cambio climático e incrementar la producción de alimentos”.
Francisco reitera una vez más que la lucha contra el hambre nos exige superar la fría lógica del mercado, que se centra ávidamente en el mero beneficio económico y la reducción de los alimentos a una mercancía como muchas otras, y fortalecer la lógica de la solidaridad.
En el mensaje, el Papa asegura la cercanía de la Santa Sede y de la Iglesia católica al compromiso en el sector alimentario de la FAO y otras realidades, para que los derechos fundamentales de toda persona estén garantizados e invocando la bendición de Dios Todopoderoso sobre todos ellos.
"Que los que siembran la esperanza y la concordia sientan el apoyo de mi oración para que sus iniciativas y proyectos sean cada vez más fecundos y eficaces", concluye.+