La Rioja recordó a sus mártires: Un grito de esperanza y compromiso valiente
- 19 de julio, 2021
- La Rioja (AICA)
En el día en que la Iglesia recuerda a los Mártires Riojanos, el obispo de La Rioja, monseñor Dante Gustavo Braida, presidió el sábado 17 de julio una misa en la parroquia San Martín de Porres.
Con una misa presidida por el obispo de La Rioja, monseñor Dante Gustavo Braida, la comunidad diocesana recordó el 17 de julio a los Mártires Riojanos. La celebración tuvo lugar en la parroquia de San Martín de Porres, lugar donde monseñor Angelelli celebró la misa de Noche Buena en 1971, debajo de un algarrobo que aún se conserva.
En su homilía, monseñor Braida manifestó alegría y esperanza al celebrar la fiesta en honor de Carlos de Dios Murias, Gabriel Longueville, Wenceslao Pedernera y Enrique Angelelli, unidos a tantas comunidades “que hoy también los celebran y buscan seguir las huellas que ellos nos dejaron como guía segura para vivir el Evangelio en esta tierra riojana, argentina y latinoamericana”.
“Huellas de una espiritualidad centrada en Jesucristo y encarnada en la realidad concreta de cada comunidad, huellas de búsqueda de un mundo más justo, inclusivo y fraterno, huellas de valentía para alentar nuevas iniciativas que ayuden a las personas a crecer y salir de situaciones de pobreza indignantes, huellas de esperanza, de esa esperanza que brota de la fe en Aquel que venció todo mal desde el amor profundo a su Padre y a su Pueblo”.
La vida de los mártires, consideró, es “un grito de esperanza, que nos anima a poner los ‘ojos fijos en Jesús’ y el oído atento a su palabra dejándonos llenar por su amor oblativo y a entregar la vida en el día a día para llevar su amor y cercanía a todos, pero muy especialmente a quienes más lo necesitan, están alejados, solos y desamparados. A todos los que habitan en diferentes periferias geográficas o existenciales y necesitan ser acompañados con una cercanía solidaria propia de quien no vive para sí sino para amar y servir dando la vida a cada instante”.
En ese sentido, animó a seguir el ejemplo de los mártires, encarnando “una escucha atenta, un consuelo necesario, un servicio oportuno, una ayuda concreta, un trabajo solidario”.
Y citando a monseñor Angelelli, expresó: “Tenemos que ir modelando una Iglesia diocesana, donde todos nos sintamos fuertemente corresponsables de la misión salvadora traída por Cristo al hombre de nuestro pueblo, sin atadura ninguna y servidora de todos; profética y santificadora, y a la vez identificada con este pueblo.. servidora de los pobres y a la vez realizadora de la fraternidad con todo hombre que pise el suelo riojano; convertida y a la vez hermana del débil que pecó.
Finalmente, invitó a los fieles a responder juntos al llamado a la santidad “como lo hicieron nuestros beatos, dejando que el amor de Cristo nos ayude a desprendernos de nuestras seguridades para salir al encuentro de los demás con un corazón sencillo, sensible y de generosa entrega que se anima a ‘primerear’ con la cercanía concreta, alentando nuevas iniciativas pastorales y sociales, alentando nuevos espacios de participación y trabajo en redes”.
Durante la celebración, el Ministerio Diocesano de la Música y el Canto interpretó algunos temas de la “Misa Riojana”, que fueron adaptados para que la celebración pueda ser transmitida a través de canal 9 de la provincia y las redes sociales.
En Chamical, localidad que se encuentra en fase 1 de aislamiento social preventivo y obligatorio, los actos previstos para celebrar la festividad de este año tuvieron que adaptarse debido a las restricciones sanitarias, que imposibilitaron realizar las actividades tradicionales en memoria de los mártires. La misa en su memoria fue celebrada en la parroquia El Salvador, donde reposan las reliquias de los padres Carlos y Gabriel.+