La Iglesia correntina celebra el chamamé, patrimonio de la humanidad

El ritmo correntino del chamamé fue proclamado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. La Iglesia correntina celebró el acontecimiento.

El arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik OFMCap, el obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín, y la comunidad de Itatí celebraron la proclamación del chamamé como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

Monseñor Stanovnik se mostró “profundamente conmovido y muy feliz por la noticia” y destacó: “Ñande Rekó, esta expresión que combina poesía, canto y danza, significa un modo propio de ser con los otros y de estar en el mundo para el alma correntina”.

“El alma correntina expresa generosamente en el chamamé ese modo de ser y estar, y ese modo refleja hermosos rasgos que el Creador dejó plasmado en su creatura. Podríamos decir: en Dios hay Ñande Rekó, esa preciosa herencia que se refleja en los valores que enriquecen el chamamé”. 

“La poesía, el canto y la danza correntinas, al favorecer una cultura del encuentro, se basa en el respeto y la dignidad del otro. Reconoce, valora y se alegra por la diferencia y complementariedad entre el varón y la mujer. Canta a la belleza de la mujer y al coraje del varón. La mujer además de ser la compañera fiel, es madre y es abuela”, afirmó. 

“Aparece con frecuencia el cuidado y la protección de la propia familia, donde siempre cabe uno más. Se exalta la fraternidad, la hospitalidad y la solidaridad. Se valora la sobriedad de la vida y el trabajo para el sustento. Se promueve la justicia que se le debe al pobre y se cultiva un especial e intenso sentido de fiesta, lo cual pone de manifiesto un corazón agradecido y alegre, aún en medio de las penurias que atraviesa cotidianamente”. 

“Todo esto le da peso, gravedad y consistencia. En una palabra, identidad propia tanto a la religiosidad y a la música del pueblo correntino. Celebro de corazón junto al pueblo correntino la declaración de la Unesco proclamando el chamamé como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad”, concluyó el arzobispo.

En adhesión al mensaje del arzobispo de Corrientes, el obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín, expresó su alegría, uniéndose a las diversas expresiones de júbilo que llegaban desde todos "los rincones" y departamentos de la provincia.

Mediante un audio, monseñor Canecín recalcó "el momento cultural y la expresión que reafirma los auténticos valores culturales que identifican a los correntinos en este gran legado de nuestros ancestros".

 En este reconocimiento tan trascendente para nuestra provincia, región y la Argentina, el obispo de Goya expresó “el júbilo que sentimos como comunidad" portadora de este bien inmaterial.

La reunión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco se desarrolló en París, y la votación de la postulación del chamamé que fue incorporado a la lista representativa del PCI (Patrimonio Cultural Inmaterial) fue esperada con mucha expectativa.

Por su parte, la comunidad de Itatí se sumó a las celebraciones con música y danza, en un festejo virtual organizado por la Subsecretaría de Cultura de la Municipalidad, que se realizó en el interior de la basílica, debido a las condiciones del tiempo, y contó con la participación del conjunto "Los Hijos de Itatí", el ballet folclórico municipal "Ritmo de mi Tierra" y la conducción de Mirno Silva Bizarro.

También se sumaron al festejo los Bomberos Voluntarios con el sonar de las sirenas, al igual que las ambulancias del Hospital de Itatí.

Qué es el chamamé
El chamamé es un género musical bailable del folclore de la Argentina, correspondiente a la música litoraleña. Es una danza alegre y animada, que trasciende la música y se convierte en una expresión personal y colectiva.

En la Argentina es escuchado en las provincias de Corrientes, Entre Ríos, centro-este de Formosa, Santa Fe, El Chaco, y en toda la provincia de Misiones, región denominada Litoral Argentino, donde es la música más popular. También es escuchado en el norte santiagueño. A su vez, es escuchado en Bolivia, Paraguay, sur del Brasil, parte del Uruguay y sur de Chile.

La danza puede tener un ritmo alegre y animado o, por el contrario, ser triste y alegórica, por lo que existen varios tipos de chamamé, que reflejan a su vez diversos estados emocionales o circunstanciales de sus cultores.+