Mons. Ñáñez: Jesús está siempre disponible y atento a nuestras necesidades
- 3 de agosto, 2020
- Córdoba (AICA)
El arzobispo de Córdoba, monseñor Carlos José Ñáñez, presidió la misa dominical en la parroquia Nuestra Señora de Lourdes y Santo Cura de Ars.
El arzobispo de Córdoba, monseñor Carlos José Ñáñez, presidió el 2 de agosto la misa dominical en la parroquia Nuestra Señora de Lourdes y Santo Cura de Ars.
En su homilía, relató la escena que se presenta en el Evangelio: “Jesús quiere irse a un lugar apartado para elaborar el duelo por la muerte del hombre, pero la multitud, que está ansiosa de verlo, lo sigue, porque quiere beneficiarse con sus gestos sanadores”.
“La situación de la gente es de una gran postración, religiosa y socialmente tienen diversas necesidades y andan en busca del Señor para un alivio. Jesús, por su parte, al contemplar la multitud deja de lado su plan, y compadecido atiende a esa gente”, recordó.
“La compasión de Jesús no es una lástima, sino ponerse en el lugar de acompañarlo, aliviarlo, ayudarlo, con sus gestos sanadores, las curaciones que realiza, y haciéndose cargo también de las necesidades”.
“Y aquí viene este dialogo que se plantea con los discípulos, porque ellos, conscientes de la hora que están y del lugar donde se encuentran le sugieren al Señor que despida a la gente, y la actitud de los discípulos tiene cierta lógica, pero Jesús de pronto les dice: ‘No, háganse cargo’. Así como él en su compasión se ha hecho cargo buscando consolar y ayudar a esa gente, ahora les pide a los discípulos que ellos se hagan cargo”.
“Y la respuesta de ellos es: Bueno, no tenemos nada más que cinco panes y dos pescados para una multitud enorme. Entonces, la respuesta de Jesús es: ‘Tráiganmelos’”, detalló.
“Todos comen hasta saciarse”, señaló el prelado. “Era propio de la expectativa de Israel, que en el tiempo del mesías todas las necesidades iban a quedar cubiertas, iba a haber saciedad. Entonces aquí hay un adelanto”.
Los detalles de este relato, consideró monseñor Ñáñez, nos invitan a la reflexión. “Y una de las cosas que nosotros podemos descubrir en este relato es la disponibilidad de Jesús: en la escena evangélica está disponible para toda la multitud. Deja de lado sus planes y se hace cargo de las condiciones y situación de estas personas que lo buscan”.
“Pero Jesús, en el cielo, está también disponible y atento a nuestras necesidades”, aseguró, y “vive siempre para interceder por nosotros”.
“Este es el Jesús en el que nosotros creemos, un Jesús que también continúa su acción benéfica a través de la Iglesia, su cuerpo místico, en la medida de las reales posibilidades”, afirmó.+