El obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín, presidió el domingo 21 de julio las fiestas patronales en honor de San Liborio, acompañado por la comunidad de la localidad correntina de Solari, lugar destinado a ejercicios espirituales y encuentros diocesanos. Concelebraron el vicario episcopal para la cultura, presbítero Julián Zini y el párroco, presbítero Rodolfo Barboza.
Con una misa presidida por el obispo de Goya,
monseñor Adolfo Canecín, la comunidad de Solari, en la arquidiócesis de Corrientes, celebró el 21 de julio las fiestas patronales en honor de su patrono, San Liborio.
La Eucaristía estuvo concelebrada por el vicario episcopal para la cultura, presbítero Julián Zini, y el párroco de San Liborio, presbítero Rodolfo Barboza.
Con el lema "¿Qué es el joven para que te fijes en él?", se desarrolló previamente un triduo de preparación, que estuvo a cargo de los presbíteros Ramón Espinoza, José Ortiz y el párroco, Rodolfo Gerardo Barboza. La fiesta grande se celebró el domingo con la procesión solemne y luego la misa. En la oportunidad se celebraron confirmaciones de un grupo de jóvenes.
La fiesta comenzó con la procesión desde la parroquia San Antonio hasta la casa de ejercicios espirituales. En ese marco, monseñor Canecín recordó que "San Liborio es el protector contra los cálculos renales, cólicos, riñones y muelas. Fue un apóstol de la provincia del Maine (Francia) y obispo de Le Mans. Era aclamado por el pueblo, que admiraba en él más sus virtudes que su nobleza y su ciencia".
El prelado destacó que las tres características que distinguieron a San Liborio fueron "amor a la pureza, amor al estudio y un profundo amor a Jesucristo ante todo y sobre todo". En el año 836, el obispo de Paderborn envió una delegación a Le Mans para conseguir alguna reliquia del santo por haber tenido noticias de sus milagros.
Casa de retiros
En la diócesis de Goya, esta casa de ejercicios espirituales que se encuentra en el centro de la jurisdicción eclesial en la localidad correntina de Mariano I. Loza, comúnmente conocida como "Estación Solari", está dedicada especialmente a las grandes actividades diocesanas, al encontrarse en un lugar equidistante de varios departamentos.
Fue fundada e impulsada su construcción por el entonces obispo de Goya, monseñor Luis Teodorico Stöckler, quien trajo una reliquia del santo y la colocó en el altar de la capilla, estableciéndose un vínculo fraterno entre la diócesis de Goya y la diócesis de Paderborn, Alemania.
Es el protector de los enfermos de cálculos renales y sus imágenes suelen representarlo como un anciano obispo, dándole como atributo identificatorio unas pequeñas piedras en recuerdo del legendario milagro producido durante la traslación de las reliquias.
La casa de ejercicios espirituales "San Liborio", perteneciente a la diócesis de Goya, tiene un equipo de coordinación y administración, integrado por el diácono permanente Manuel Alonso (coordinador) y Claudia Persíncula de Alonso (secretaria), además del diácono Ignacio Reggi, la contadora Susana Moreno, la señora Aracelli Ditella de Reggi y los señores Laurentino Ramón Gómez Da Silva; Raúl Videla y Juan Ramón Enríquez.+