Durante una reunión efectuada en la sede de la curia episcopal de Nueve de Julio, el obispo diocesano, monseñor Ariel Torrado Mosconi, hizo efectiva la nueva conformación del Consejo Presbiteral. Los nuevos miembros hicieron su profesión de fe y el juramento de fiel desempeño del cargo.
El obispo de Nueve de Julio,
monseñor Ariel Torrado Mosconi, hizo efectiva la nueva conformación del Consejo Presbiteral. Fue durante una reunión efectuada el lunes 24 de junio en la sede de la curia episcopal.
Durante el acto, los nuevos integrantes efectuaron su profesión de fe católica y juramento de fiel desempeño del cargo. El cuerpo quedó conformado por un período de tres años por el vicario general, presbítero Juan Carlos Maturana; los miembros elegidos por el obispo: padre Manuel Prieto SM, presbítero Carlos Andrés Tibberi, presbítero Gabriel María Ghilardini y presbítero Mariano Ismael Cortés; los miembros titulares elegidos por los párrocos y administradores parroquiales: presbítero Tomasz Surma (Trenque Lauquen), presbítero Francisco Pérez Cadierno (Pehuajó), monseñor Carlos Luis Arive (Lincoln-Villegas), presbítero Horacio Adrián Lento (Nueve de Julio), presbítero Leandro Ariel Palanga (elegido por los vicarios parroquiales).
Como miembros suplentes se desempeñarán el presbítero Germán Loriente (Trenque Lauquen), el presbítero Justo Juan Cariz (Pehuajó), el presbítero Alcides Daniel Valverde (Lincoln-Villegas), el presbítero Gustavo Edgardo Sosa (Nueve de Julio) y el presbítero Enzo Daniel Cuellar (elegido por los vicarios parroquiales).
Según lo establecido por el Código de Derecho Canónico, el Consejo Presbiteral es uno de los órganos de ayuda al obispo en el gobierno de la Iglesia particular, al que se suman el Colegio de Consultores, el Consejo de Asuntos Económicos y el Consejo Pastoral Diocesano.
Como su nombre lo indica, se trata de un organismo consultivo conformado por sacerdotes, elegidos o nombrados por el prelado, representativos de las distintas zonas y ministerios de la diócesis. Su tarea es asesorar en la planificación, ejecución y evaluación de la acción evangelizadora en la diócesis o en aquellos asuntos de importancia que, puntualmente, el obispo considere oportunos. En tanto representativo del conjunto de cuerpo presbiteral, se lo ha comparado con una especie de "senado" del obispo que va promoviendo una conciencia colegial y fraterna tanto entre los presbíteros entre sí como entre las comunidades que conforman la diócesis.+