El Instituto para el Matrimonio y la Familia de la Pontificia Universidad Católica Argentina (UCA), emitió un comunicado titulado "Compromiso por la vida y la familia" en el que se comprometen a "adoptar todas las medidas que resultaren necesarias para la defensa de todos y cada uno de los miembros de nuestra Nación, en especial de los más vulnerables", por un futuro con "más familia, menos violencia, más vida y más futuro".
Mediante un comunicado, fechado el 30 de mayo, y firmado por su directora, licenciada Myriam Mitrece de Ialorenzi, el Instituto para el Matrimonio y la Familia de la Pontificia Universidad Católica Argentina (UCA) se compromete a "adoptar todas las medidas que resultaren necesarias para la defensa de todos y cada uno de los miembros de nuestra Nación, en especial de los más vulnerables como los son los niños por nacer y sus madres en situación de mayor y menor vulnerabilidad".
El compromiso se basa en "el respeto y la defensa de la vida humana, desde su concepción hasta su fin natural, sobre todo de los niños en general y, en particular, de los niños por nacer; es decir de todo ciudadano de cualquier edad o condición".
"Defendemos una educación sexual, fundada en valores indiscutibles, de base científica y no ideológica, entre los que cabe subrayar el irrenunciable derecho y deber de los padres a ser los primeros educadores de sus hijos", afirman, recordando que "el Estado debe ofrecer un servicio educativo de manera subsidiaria, acompañando la función indelegable de los padres, que tienen derecho de poder elegir con libertad el tipo de educación que quieren dar a sus hijos según sus convicciones".
"Porque entendemos que la familia fundada en el matrimonio entre hombre y mujer, como institución primaria y básica de la sociedad, debe ser respetada y protegida por todo el sistema jurídico y político, en orden a construir y mantener una sociedad donde todos sus miembros gocen del derecho a la primordial tutela y función que sólo la familia, como primera célula social, puede brindar, promocionando el bien común en todas sus formas", sostienen.
"Porque defendemos el derecho a la salud integral de todos los ciudadanos y en particular, de aquellos en situación de mayor vulnerabilidad social, de los que el Estado no se pude desentender, desamparar ni mucho menos, poner en peligro cierto mediante políticas que aniquilen derechos humanos fundamentales, como lo es el derecho a la vida, que tiene rango y jerarquía constitucional, además de sus cimientos filosóficos en el derecho natural", advierten.
Finalmente, "porque somos promotores de la cultura de la vida y del amor, deseamos continuar el camino de nuestros mayores, aportando nuestra labor cotidiana en la construcción de una Patria más justa y respetuosa del ser humano y de la sociedad que lo cobija en orden a la plena realización de todo su potencial intelectual, físico y espiritual en el marco de un verdadero y genuino estado de derecho", argumentan.
Por todo ello, declaran: "Asumimos el compromiso de adoptar todas las medidas que resultaren necesarias para la defensa de todos y cada uno de los miembros de nuestra Nación, en especial de los más vulnerables como los son los niños por nacer y sus madres en situación de mayor y menor vulnerabilidad", y afirman: "Trabajaremos en comunidad por un futuro sin violencia y con mayor y mejor protección de los derechos de todos".
"Este es nuestro compromiso irrenunciable y es el reclamo legítimo de las familias argentinas y el deber que tenemos para con los que aún no tienen voz. Si así no lo hiciéramos que Dios y la Patria nos lo demanden", concluyen.
Informes en:
http://uca.edu.ar/es/facultades/instituto-para-el-matrimonio-y-la-familia +