Las diócesis de Quilmes y Morón, ambas ubicadas en el conurbano bonaerense, están transitando su propio camino sinodal, un "caminar juntos" en comunidad. Al respecto, en Quilmes destacaron que el tema central es "el anuncio en la realidad de la diócesis", mientras que el obispo de Morón, monseñor Jorge Vázquez, manifestó la disposición de la diócesis a transitar este tiempo con "la alegría que nos da el Resucitado".
Las diócesis bonaerenses de Quilmes y Morón, se encuentran transitando diferentes etapas de su propio camino sinodal, tiempo de "caminar juntos" en comunidad, escuchando las necesidades y priorizando la misión de hacer que el anuncio llegue a todos.
Rita Catrihual, una de las coordinadoras del sínodo quilmeño, destacó que "el tema central es el anuncio en la realidad de la diócesis. Asumimos en este lugar del sureste del gran Buenos Aires la riquísima enseñanza del pontificado de Francisco en sus principales documentos. En vista de que en 2021, celebraremos los 45 años de creación de la diócesis; 45 años de la ordenación episcopal e inicio del ministerio de monseñor Jorge Novak; los 40 años del inicio del Primer Sínodo Diocesano y los 20 años de la pascua de monseñor Novak, consideramos que en 2021 tendrá lugar la Apertura del Tercer Sínodo de Quilmes".
En declaraciones a Radio María, la coordinadora también indicó que "es un tiempo muy especial para escuchar a todos, a los que están dentro y también a los que se sienten fuera de la Iglesia. Lo que buscamos es poder realmente caminar juntos".
Desde Europa,
monseñor Marcelo Maxi Margni, obispo auxiliar de Quilmes, añadió: "La idea es que en el 2020 ya podamos ir interpretando lo que nos entrega la consulta al Pueblo de Dios e ir elaborando algunas líneas pastorales de acción, que serán el ´hacia dónde` nos invita a caminar el Espíritu de Dios".
El prelado manifestó que "entre los frutos del Concilio Vaticano II está la institución del Sínodo de los Obispos, realidad que encontramos en la tradición más antigua de la Iglesia. Se redescubrió esta riqueza de la sinodalidad de la Iglesia, apagada por el devenir del tiempo y el envejecimiento de estructuras que no facilitaban la vida en comunión y la evangelización".
Por su parte, el obispo de Morón,
monseñor Jorge Vázquez, expresó que "la fuerza de la alegría es, de por sí, evangelizadora. Yo creo que debemos transitar este tiempo con esa alegría que nos da el Resucitado", afirmó.
"La sinodalidad es una nueva manera de ejercer la autoridad en la Iglesia. Porque la evangelización es un proceso de comunicación. Y para comunicar la Palabra, llevar la palabra de Jesús, tiene que haber escucha. Escucha gratuita de la palabra que vamos a anunciar. Jesús viene a liberarnos de la sordera, porque cuando estamos sordos, también nos quedamos mudos? Pero no podemos ser una Iglesia muda, una comunidad muda. Tenemos que ser una comunidad que, a los pies de la Virgen, hable de su Hijo", sostuvo.
Además, el obispo de Morón destacó el gesto sinodal de las confirmaciones diocesanas del año pasado, que "permitió llevar el Evangelio a todos", con la presencia de más de 5000 fieles de todas las comunidades.+
Escuchar la entrevista aquí