En su reflexión dominical para la Pascua de Resurrección, el obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Oscar Frassia, meditó frente al relato evangélico de Juan: "¡Es verdad, es cierto, Cristo ha resucitado! ¡Cristo ha vencido la muerte y ha vencido el pecado y está presente en medio de nosotros! ¡Felices Pascuas para todos!", exclamó.
Con el título "Cristo resucitado es vida nueva",
monseñor Rubén Oscar Frassia, obispo de Avellaneda-Lanús, reflexionó en su columna dominical "Compartiendo el Evangelio" sobre el relato evangélico de Juan: "¡Es verdad, es cierto, Cristo ha resucitado! ¡Cristo ha vencido la muerte y ha vencido el pecado y está presente en medio de nosotros! ¡Felices Pascuas para todos!", exclamó.
Al celebrarse el Domingo de Pascua de Resurrección, el prelado lo describió como "el misterio más grande, más sorprendente, donde la lógica humana se hace trizas, donde la lógica no tiene explicación; pero ese intercambio misterioso entre lo divino y lo humano -ese Verbo, esa Palabra de Dios que se encarnó en el seno virginal de María- ese verdadero Dios y verdadero Hombre, vino a romper la oscuridad de la humanidad, a romper el odio, a destrabar distintas esclavitudes".
En este sentido, afirmó que "la presencia del Cristo resucitado, el que vence el pecado y la muerte, es para darnos una vida nueva, es para divinizar al ser humano, es para decirle que el ser humano no sólo es cuerpo, no sólo es materia, sino también espíritu y que estas dos realidades son parte integrante de nosotros y que tenemos que caminar con ambas realidades si no seríamos incompletos, nos falta la mitad o más de la mitad".
Monseñor Frassia invitó a la comunidad diocesana a vivir "como resucitados, no como vencidos", a "no perder nuestras raíces", ni "la cultura de la fe". "Que Dios esté presente en casa, en nuestras conversaciones, con nuestros valores, con la enseñanza, con la doctrina, en la Iglesia, en la sociedad, en las leyes, en la política, en la ciencia; en todos los ámbitos. No separemos, no atomicemos y no dividamos más", subrayó.
"Que Cristo, el Resucitado, nos haga experimentar la fuerza del poder de Dios en nosotros, en nuestro presente, con nuestro pasado, proyectándonos hacia un futuro más promisorio", dijo el obispo de Avellaneda-Lanús, al tiempo que deseó felices Pascuas a la comunidad e impartió su bendición.+