El obispo de San Martín, monseñor Miguel Ángel D´Annibale, reflexionó esta semana sobre la parábola del Padre Misericordioso, animando a los fieles a buscar la misericordia de Dios, dejarse abrazar y perdonar por Él.
En una nueva entrega de sus reflexiones semanales sobre el Evangelio, el obispo de San Martín,
monseñor Miguel Ángel D´Annibale, se refirió a la parábola del Padre Misericordioso, comúnmente llamada "Parábola del Hijo Pródigo".
"Este Evangelio del hijo pródigo muestra una experiencia personal de redención, de salvación y de misericordia", afirmó el obispo, y consideró: "Creo que Lucas puso lo suyo, donde él mismo se sintió perdonado, abrazado, sostenido y animado por este Padre Misericordioso".
"Hoy con este Evangelio tenemos que buscar la misericordia de Dios, tenemos que dejarnos abrazar por Dios, tenemos que dejarnos perdonar por Dios. Sólo les pongo un ejemplo: ustedes vieron el hermano mayor de la parábola, la conocen, vieron que el hermano mayor no quiso entrar, no sé si entró dentro de la fiesta", relató. "Se enojó porque el Padre perdonó a su hermano, y se enojó porque él había cumplido todo pero no pudo aceptar a un hermano que vuelve arrepentido", recordó.
"La verdad que esta figura de hermano mayor es algo que nos tiene que llamar seriamente a cada uno de nosotros a pensar cuál es nuestra actitud con aquel que se equivoca, con aquel que elige caminos que no compartimos, con aquel que elige opciones que no son las nuestras y que Dios tiene su misericordia sobre él", reflexionó el obispo.
"Está bueno que quede abierto el Evangelio así, porque en el fondo te dice: ¿Vos qué hacés?¿Entrás o no entrás? La pregunta quedó abierta así para que cada uno de nosotros, ubicándonos como hermano mayor digamos: ¿Entro a la fiesta de mi hermano que volvió, a la fiesta de la conversión, o me quedo afuera enojado?´", señaló.
"Por eso, primero cada uno de nosotros, como el hermano menor, volvamos a la casa arrepentidos y diciendo pequé contra el cielo y contra ti, y sepamos que va a haber un Padre que nos va a abrazar y que nunca nos va a soltar", animó.
"En estos tiempos que corren tenemos que ser una Iglesia que cada vez más transmite la misericordia y por eso, cuando propuse el camino de la asamblea, cuando lo propusimos en la diócesis de San Martín, lo hemos propuesto como camino de escucha", afirmó monseñor D´Annibale, convocando a la comunidad: "Mostremos a este Padre misericordioso que abre los brazos a todos y los recibe, esta es la clave de la Iglesia que hoy tenemos que ser".
Finalmente, llamó a la caridad de los fieles, a la solidaridad con los hermanos que más necesitan, porque es una manera de "entrar a esta fiesta que el Padre nos invita y un modo de comprometernos".+