En su reflexión del 8º domingo durante el año, 3 de marzo, monseñor Gabriel Mestre, obispo de Mar del Plata, indicó tres expresiones para entender las lecturas: "Ojos sanos para mirar", "Frutos buenos" y "Victoria sobre la muerte". Y resumiendo los textos bíblicos, expresó: "Si el Señor con su gracia está en nuestra esencia, si los valores del Evangelio son la savia que corre por nuestras venas y arterias, entonces nuestros frutos serán esencialmente buenos".
"Si el Señor con su gracia está en nuestra esencia, si los valores del Evangelio son la savia que corre por nuestras venas y arterias, entonces nuestros frutos serán esencialmente buenos", dijo
monseñor Gabriel Mestre, obispo de Mar del Plata, al resumir los textos bíblicos de este domingo 3 de marzo.
En tres expresiones, explicó las lecturas del 8º domingo durante el año: "Ojos sanos para mirar", "Frutos buenos" y "Victoria sobre la muerte".
?Ojos? sanos para mirar
En el Evangelio del domingo, "las metáforas sobre la ceguera y los ojos cubiertos son más que elocuentes en las palabras del Señor", dijo monseñor Mestre al comenzar. "La tentación de querer guiar a otro cuando nosotros mismos no estamos maduros para conducirnos se puede dar en muchas circunstancias de nuestra vida", advirtió el prelado. En efecto, "corremos el riesgo de querer sanar los ojos de los demás sin darnos cuenta de que nuestros ojos están enfermos, obstruidos e incapacitados para ver lo que hay que ver".
Por el contrario, "necesitamos sanar nuestra mirada, curar y liberar a nuestros ojos de todo obstáculo". Monseñor Mestre invitó a la comunidad a abrirse al Señor "para limpiar nuestra mirada y dejarnos curar los ojos para ver las cosas como son". Porque los ojos "bloqueados" no hacen más que "distorsionar la realidad, y nos hacen analizar y discernir la vida de forma equivocada", aclaró
?Frutos? buenos
Un elemento presente en todas las lecturas son los frutos, pero "¿qué tipo de frutos estamos dando en la vida?". El obispo de Mar del Plata exhortó a observar dentro de cada uno: "Si el Señor con su gracia está en nuestra esencia, si los valores del Evangelio son la savia que corre por nuestras venas y arterias, entonces nuestros frutos serán esencialmente buenos", explicó. Y aunque "por la humana debilidad podamos tener una caída" ? "si nuestra raíz está en el Señor, van a dominar en nuestra vida los frutos buenos del Reino".
?Victoria? sobre la muerte
En el último punto, monseñor Mestre se detuvo en la segunda lectura: "una excelente catequesis de San Pablo sobre la fe en la resurrección y la vida eterna por la victoria de Cristo sobre la muerte". El obispo marplatense opinó que al mundo contemporáneo "le cuesta hablar de la muerte porque no suele haber esperanza en la resurrección". Como católicos, que tenemos la esperanza en la vida eterna, "a veces nos cuesta anunciar con claridad que la muerte ha sido vencida y que la vida tiene la victoria", lamentó. Por el contrario, alentó a repetir con fe la expresión del Credo: "Creo en la resurrección de los muertos y la vida eterna".+