Los medios católicos deben servir a la evangelización

A diferencia de los medios de comunicación seculares, los medios católicos no pueden intentar mantener la atención de las personas "a toda costa", sino que deben mantenerse fieles a la verdad y motivar a los lectores a buscar las respuestas a "las preguntas realmente importantes de la humanidad", expresó el arzobispo de Katowice, Polonia.

Como lo hace tradicionalmente en un día del primer mes del año, el arzobispo de Katowice, monseñor Wiktor Pawel Skworc, visitó el Instituto de Medios "Instytut GOSC" y tras recorrer sus instalaciones realizó una visita pastoral a la oficina editorial donde conversó con los periodistas. Después presidió una solemne Eucaristía en la capilla del equipo editorial del Instituto, en cuya homilía reflexionó sobre la tarea de los medios de comunicación católicos y su responsabilidad sobre la realidad actual. El prelado recordó que el principal deber de los medios católicos es "proclamar la verdad de que Dios amó tanto al mundo que le dio a su Hijo, y que todos los que creen en Él no perecerán sino que tendrán la vida eterna". Como inspiración para los periodistas católicos propuso la figura de San Juan Bautista, quien no apareció para llamar la atención sobre sí mismo sino para indicar el camino hacia Jesucristo. Para el prelado, esto representa "una tarea muy difícil": "volverse transparentes, de modo que solo se pueda ver a Dios; para que las personas que nos han escuchado hasta el momento recurran a la Verdad que les comunicamos". A diferencia de las prácticas de los medios de comunicación seculares, los medios católicos no pueden intentar mantener la atención de las personas "a toda costa", sino que deben mantenerse fieles a la verdad. Además, estos medios deben motivar a los lectores a buscar las respuestas a "las preguntas realmente importantes de la humanidad" y que encuentran su respuesta en Jesucristo. Monseñor Skworc indicó que el adecuado testimonio de los medios de comunicación católicos tiene como efecto "construir una comunidad verdaderamente humana, basada en la cercanía, la ternura, la comprensión y el diálogo, en el amor". Para lograr este fin, los comunicadores católicos deben ser "bautizados en el Espíritu Santo", para poder transmitir la verdad a imagen de Jesucristo.+