Mons. Ñáñez: "La vida cristiana debe centrarse en Jesús"
- 29 de enero, 2019
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Córdoba
El arzobispo de Córdoba, monseñor Carlos Ñáñez, presidió la misa dominical en la parroquia San Juan Bosco y Santo Domingo Savio, del barrio Don Bosco, donde recordó que Jesús vino a vencer la cautividad del pecado y destacó la importancia de celebrar el domingo como Día del Señor.
El arzobispo de Córdoba, monseñor Carlos Ñáñez, presidió la misa dominical en la parroquia San Juan Bosco y Santo Domingo Savio, del barrio Don Bosco, donde recordó que Jesús vino a vencer la cautividad del pecado y destacó la importancia de celebrar el domingo como Día del Señor.
Al reflexionar sobre el texto evangélico de San Lucas, el prelado sostuvo que Jesús trae un "mensaje de perdón, de misericordia", viene a liberar de esa cautividad "más honda del corazón" que es el pecado y a sacar a los hombres de "esa suerte de esclavitud que inclina al mal".
El arzobispo marcó cómo el evangelista subraya en el texto que la gente que escuchaba a Jesús en las puertas del templo de Nazaret fijaba los ojos en Él.
"La característica de la vida cristiana debe centrarse en Jesús. Nosotros no somos los sostenedores de una serie de verdades, practicantes de una serie de normas, somos los seguidos y los amigos de Jesús. Y nuestra vida tiene que estar centra en Él. Todos en la comunidad miramos a Jesús y estamos atentos a Él, a su obrar, a su enseñanza. Todo un programa para nuestra vida cristiana", aseveró.
Monseñor Ñáñez valoró la importancia para el cristiano de festejar el domingo como "Día del Señor" puntualizó: "Es el día para escuchar la Palabra de Dios de un modo especial, para abrir el corazón en alabanza, en acción de gracia, y también para escuchar la Palabra.
"La Palabra da consuelo, ilumina, nos desafía, nos alienta", enfatizó, e invitó a "tomar en serio esto de leer la biblia, sobre todo el Evangelio".
"El domingo es un día para alabar, escuchar y agradecer a Dios. Pero también para el descanso y la fiesta", indicó.
El arzobispo cordobés consideró que el descanso dominical es "algo importante", porque permite compartir la mesa familiar, y es por eso que el Día del Señor "tiene una resonancia humana, hace nuestra vida más digna".
Por último, monseñor Ñáñez insistió en destacar que el domingo es "el día de la fiesta por excelencia, la Eucaristía".+