Miles de personas procedentes de Posadas, Jardín América y Alem, algunos de ellos en bicicleta, participaron, bajo una lluvia intensa, de la peregrinación al santuario de Loreto, donde el obispo local, monseñor Juan Rubén Martínez, convocó a cada uno a actualizar el Sí a Dios como lo hicieron los Santos Mártires de las Misiones, y a pedir por los más pobres.
Miles de personas procedentes de Posadas, Jardín América y Alem, algunos de ellos en bicicleta, participaron, bajo una lluvia intensa, de la peregrinación al santuario de Loreto, en la localidad misionera del mismo nombre, con el lema "El Sí de María, nuestro Sí a la vida".
En el santuario mariano el obispo de Posadas,
monseñor Juan Rubén Martínez, presidió la misa dominical en honor de los Santos Mártires de las Misiones: Roque González de Santa Cruz, Alonso Rodríguez y Juan del Castillo, y el padre Antonio Ruiz de Montoya.
Durante la homilía, monseñor Martínez llamó a estar de pie en la esperanza y no dejarse decaer, además de convocar a los peregrinos a actualizar el Sí a Dios y pedir por los más pobres.
"Aún con las tormentas, con las dificultades que puedan presentarse en nuestro camino tenemos la entereza, la certeza, de que vamos a estar de pie en la esperanza y que no vamos a decaer por muchas situaciones de un mundo mercantil y materialista que obviamente no quiere la fe, ni los valores del Evangelio y tratan de destratarlos", subrayó.
"Por eso acá ante el ánimo de la entrega hasta el martirio de nuestros mártires queremos actualizar nuestro Sí a Dios, ante nuestra madre de Loreto queremos actualizar nuestro Sí a Dios", porque Él es la fuente del amor y siempre nos acompaña", sostuvo.
En relación con la II Jornada Mundial de los podres, monseñor Martínez manifestó: "Nuestro tiempo, caracterizado por el pragmatismo y por una proclividad a priorizar lo mercantil, va generando cada vez más pobreza y, por lo tanto, más pobres en el mundo. Lo percibimos también en nuestra Patria y en nuestra provincia. Son miles las familias que sólo sobreviven, son miles los jóvenes, niños y ancianos que sobreviven en la marginalidad. No vemos que este planteo sea tratado seriamente. Sólo se dan cifras que no motivan a ningún funcionario de la política, del mundo empresarial o sindical a sentarse a tratar como un problema de Estado el flagelo de la pobreza".
"Desde los organismos internacionales que responden a los países ricos del mundo proponen caminos de eliminación de los pobres antes que caminos de equidad e inclusión. Peor aún, ven a los pobres como un peligro frente a la escasez de materia prima de cara al futuro. De ahí las inversiones de apoyo para la reducción poblacional por cualquier vía, inclusive con los programas de eliminación de los niños por nacer. El lema de la jornada de este año es ?Este pobre gritó y el Señor lo escuchó?. Rezamos e imploramos junto con ellos", pidió.
El obispo de Posadas invitó a cada uno a actualizar el Sí a Dios y a llevar el Evangelio, siempre con la mirada fija en los hermanos más necesitados, que están en el corazón del Evangelio y en los nuestros también, y concluyó: "Debemos responder con amor y con misericordia".+